Nuestras partidas alcanzan una nueva dimensión al dirigir combates interesantes. Lo primero y muy importante sería decir lo siguiente: la disputa marcial per se no provee automáticamente de elementos atractivos. Esos elementos tienen que venir del director de juego y el resto de jugadores. En teoría eso parece contra-intuitivo. Resulta razonable que un choque de espadas, bolas…